Desde pequeñito lo que más me gustaba era pintar cosas, usar plastilina y construir edficios con legos. Los colores, las manualidades y las fotos con aquella mini cámara que me regalaron por mi primera comunión me encantaban. Más adelante vinieron los juegos de mecano, los compases, las reglas milimetradas y los rotrings. Todo hacía presagiar que entraría a estudiar arquitectura sin embargo acabé en la universidad estudiando Ciencias Políticas, con el objetivo de lanzarme a la carrera diplomática ya que otra de mis pasiones era viajar. Una licenciatura, un Posgrado en Comercio Exterior y tener la suerte de hablar varios idiomas me sirvieron para desarrollar una carrera comercial internacional durante más de 15 años y viajar por más de 60 países.

Sin embargo mi gran afición fue siempre el diseño y las artes en general. Mi madre siempre decía: “tú serás un gran arquitecto”. Se equivocó un poco aunque no andaba desencaminada. Mi pasión por la arquitectura, las casas, la pintura, la arqueología, la decoración, el diseño, los legos y los puzzles hicieron que tras la crisis del 2008 me pusiera a estudiar finalmente diseño gráfico y aquí estoy desde entonces.

Soy muy creativo, observador y detallista, bastante autodidacta, polifacético y muy resolutivo y he sabido adaptarme en cada etapa. Trato siempre de encontrar la mejor solución a los retos planteados y estoy en constante evolución, actualizando y formándome en todo lo que considero que puede ayudarme a crecer.

No descarto nuevos cambios en mi vida pero de momento disfruto enormemente con lo que hago y pienso seguir poniendo toda mi pasión para seguir creando cosas bellas y útiles y satisfacer las necesidades de los que cuentan conmigo en cada proyecto.